Como ocurre con las otras pruebas piloto realizadas dentro del ámbito del EduFire Toolkit, el objetivo de la prueba piloto en portugal era evaluar los retos y las unidades creadas dentro del ámbito del proyecto.
Con este fin, el equipo de ISA se puso en contacto con Miguel Alves, profesor de la escuela Miraflores (zona de Lisboa) y le invitó a probar los retos de su elección. Con alegría de todo el mundo aceptó el reto de probar los Retos. Optó por trabajar con Preparación (Unidad 5).
Durante dos meses, trabajando dos horas semanales, trabajó con dos clases de los cursos de Educación Visual y Educación Tecnológica de la prueba, correspondientes a unos 50 alumnos.
Mediante las unidades como material de fondo y el soporte técnico del equipo del ISA, Miguel guió a sus estudiantes en la creación de un pueblo seguro, tal y como definen las leyes portuguesas actuales.
El proceso empezó debatiendo y entendiendo lo que era un pueblo seguro. Las preguntas impulsoras eran: ¿Cómo puedo crear un pueblo seguro contra incendios forestales? ¿Cuáles son las normas de prevención que debo seguir?
Tras un período de investigación, los estudiantes acordaron las características de seguridad contra incendios forestales más importantes para representarlas en una maqueta. Fueron:
- Limpiar de combustible (vegetación), al menos 50 metros en torno a las casas
- Alejar los árboles de las casas y palos eléctricos.
- Mantener la tierra limpia de combustible (exceso de vegetación)
A continuación, los alumnos se repartieron el trabajo entre ellos, decidiendo quién haría cada característica de la maqueta, como casas, tierra, árboles, etc.
La maqueta final no sólo parecía impresionante, sino que también era muy educativa, puesto que tenía una leyenda que explicaba todas sus características principales.
Aquí algunos ejemplos:
1 – Depósitos de agua estratégicos para la lucha contra incendios forestales.
5 – ¡Peligro! Combustible (vegetación) a menos de 50 metros de las casas.
Puede ver la descripción entera aquí: (presentación de Miguel)
La maqueta formó parte de una exposición que se celebró entre mayo y junio en un centro comercial local como parte de las celebraciones del día de los niños. Esto no sólo muestra y reconoce el gran trabajo realizado por los estudiantes, sino que también ayuda a otros jóvenes a tomar conciencia de la necesidad de estar preparados para los incendios.
Para concluir, los alumnos se implicaron activamente a lo largo del Reto, mostrando la mayoría un interés genuino por las tareas que comprendía.
Queremos expresar nuestro agradecimiento a Miguel Alves, que nos ayudó no sólo con las labores del proyecto EduFire Toolkit, sino que también ayudó a las generaciones futuras a estar mejor informadas y preparadas para hacer frente a los incendios forestales.